Todos los hemos escuchado alguna vez. Son esos rugidos implacablemente suaves a mitad de noche. O quizás usted nunca los haya escuchado...quizás usted es el que ronca.

El roncar nos afecta a casi todos. Como casi 90 millones de estadounidenses roncan todas las noches, de acuerdo a la Fundación Nacional del Sueño (National Sleep Foundation, en inglés), cualquiera pensaría que sabemos la razón exacta por la cual lo hacen. Pero los expertos en medicina lo atribuyen a una variedad de factores que podrían incluir el peso, uso de alcohol, medicamentos e incluso la falta de suficiente horas sueño.

Es tan común que a veces pensamos que roncar es perfectamente natural, incluso que es saludable. Pero por lo general, los ronquidos son un síntoma de algo más que sucede en el cuerpo. Y mientras sus ronquidos persistan, la salud de su sonrisa está en riesgo.

Las personas roncan cuando tienen un paso de aire parcialmente o completamente obstruido. La vibración de un tejido, una cavidad nasal inflamada o llena de fluido o una obstrucción de la lengua causan ese sonido tan familiar.

No importa cuál sea la razón de la obstrucción, el efecto es el mismo: se hace difícil respirar y para superarlo abrimos nuestras bocas para dejar entrar más aire. Y ahí comienzan los problemas dentales.

Una cantidad adicional de oxígeno suena bien, pero no en este caso. Cuando su boca se queda abierta la saliva se seca. Si este problema continúa, las glándulas salivares dejan de funcionar y de producir suficiente saliva para mantener la boca húmeda, esta condición se llama xerostomía. La xerostomía es la causa oculta de la enfermedad en la encía y de pérdida de diente de 30% de los adultos, según la Fundación de Cáncer Bucal.

Las bocas secas están predispuestas a desbalances en el pH, caries y desgaste dental. Sin la saliva, se acumulan rápidamente el ácido y la placa bacterial y disuelven el esmalte o crean fosas microscópicas que crecen y se transforman en caries. Si no se atiende, las bacterias incluso podrían penetrar el diente hasta su interior donde afectaría nervios sensibles y la raíz dental.

Parecería que la saliva solo está ahí sin hacer mucho. Pero esa sustancia acuosa trabaja fuertemente en cosas como:

• Enjuagar las partículas de los alimentos

• Facilitar el proceso de mascar y tragar

• Proveer las enzimas que ayudan a digerir la comida

• Limitar el crecimiento de las bacterias mediante la neutralización de los ácidos

• Controlas el nivel de pH de la boca

• Prevenir la caries dental

• Lubricar la boca 

La saliva en forma de hilachas, la saliva espesa, una boca pegajosa o incluso el mal aliento son todas señales de que no está produciendo suficiente saliva. También podría percatarse de que su lengua muestra surcos o está seca o que tiene dificultades para ponerse su dentadura postiza. Los casos más extremos de xerostomía podrían causar cambios al sentido del gusto y dificultad para hablar o masticar.

Sea usted un roncador o no, estos síntomas de boca seca son la primera señal de que su salud dental podría estar en riesgo.

El roncar no quiere decir que va a perder sus dientes pero tiene que ser responsable con su atención dental. La primera forma de combatir la resequedad en la boca es siendo cuidadoso con sus hábitos de cepillarse los dientes. El cepillarse los dientes dos veces al día durante al menos dos minutos es el primer paso en eliminar la sobreproducción de bacterias. El usar hilo dental diariamente también es importante ya que este alcanza a las bacterias que crecen en la línea de las encías y entre los dientes.

Las personas que roncan también deben ser muy diligente y consultar el dentista regularmente. Su dentista puede revisar si tiene caries y, si la encuentra en una etapa temprana, puede incluso repararla, revertir o detener la caries dental. Si la caries es particularmente grande, su dentista puede ayudar a resolver el problema con un empaste o una corona, de ser necesario.

Para proteger su sonrisa, es importante que controle las actividades que podrían empeorar la boca reseca. Las personas que roncan y aquellos que suelen tener la boca reseca deben considerar seguir los siguientes pasos:

• Evitar alimentos o bebidas azucarados o ácidos

• Limitar el consumo de cafeína y alcohol

• Evitar la comida seca, picante o particularmente fría o caliente  que pueda irritar la boca o el sistema digestivo

• Dormir con un humidificador de aire

• Mantenerse hidratado, especialmente en la noche, tener una botella de agua a mano y tomar sorbos frecuentemente

• Probar estimulantes de saliva

• Revisar que la boca esté libre de parchos o úlceras

• Cepillarse dos veces al día y usar el hilo dental regularmente

• Consultar a su dentista regularmente 

Mantenerse al tanto de cualquier cambio en su boca o su respiración. Si usted o su pareja detecta cambios significativos, asegúrese de ponerse en contacto con su médico o dentista. 

Para obtener una respuesta informada acerca de su condición, pídale a su médico que programe una prueba nocturna de problemas durante el sueño. Si sus ronquidos están muy desarrollados, su  médica podría recomendar una medida correctiva común como por ejemplo:

• Terapia de Presión correctiva continúa en las vías respiratorias (CPAP, por sus siglas en inglés): La manga, máscara y pieza nasal de la máquina CPAP empuja aire por su vía respiratoria y evita que se cierre.

• Pieza bucal a la medida: Su dentista puede fabricarle una pieza para la boca hecha a su medida para mantener su canal de aire abierto mediante el reposicionamiento de su boca.

• Cirugía menor: Si su médico considera que es necesaria, una cirugía podría remover tejido en la parte de atrás de su garganta para despejar su vía respiratoria.