Si las lluvias de abril traen flores, entonces los ejercicios en la primavera traen una buena condición física en el verano, ¿correcto? Ponga su cuerpo y su sonrisa en forma al incorporar estos ejercicios sencillos en su rutina de cepillado. Asegúrese de empezar poco a poco, de manera que pueda durar los dos minutos completos que toma cepillarse los dientes bien dos veces al día.
5 ejercicios para activar su rutina de cepillado de dientes
1
Use la pared.
Intente sentarse con la espalda contra la pared, lo cual ejercita sus cuádriceps y su abdomen. Obtiene puntos adicionales cuando puede hacerlo de corrido durante los dos minutos.
2
Párese.
¿Quiere tonificar la parte inferior del cuerpo? Camine mientras se cepilla los dientes para cumplir con su cuota de pasos diarios. ¿Es demasiado fácil? Rete a alguien que viva con usted a una competencia de caminata durante el cepillado de dientes.
3
Párese de puntitas.
Párese en puntitas y levante las pantorrillas para tonificar los músculos de las pantorrillas. Trate de aumentar el total del número de repeticiones que puede hacer mientras se cepilla.
Recuerde, si intenta estos ejercicios mientras se cepilla los dientes, asegúrese de que aun, y de manera segura, le está prestando a sus dientes la atención que merecen. Continúe cepillándose durante dos minutos con una pasta dental con flúor dos veces al días. Cepíllese con el cepillo en un ángulo de 45 grados y préstele atención a todas las superficies de sus dientes.
4
Párese de puntitas y repita.
Siéntase con las piernas al frente suyo y la espalda derecha. Levante y baje las piernas mientras contrae el abdomen para tonificarlo. Inténtelo con las piernas derechas o con las rodillas dobladas. (Sugerencia: Cuando se siente en su cama, en una silla o en el piso, i encuentre un lugar en el cual pueda encontrar balance con facilidad y cepillarse los dientes!)
5
Contraiga los músculos de la rodilla.
¿Quiere fortalecer sus muslos? Siéntese en una superficie plana como el piso o su cama. Coloque entre sus rodillas una pelota pequeña inflable o una toalla enrollada. Lentamente, contraiga los músculos de la rodilla y apriete los músculos interiores de los muslos. Relaje un poco los músculos mientras mantiene un poco de tensión para sujetar la pelota o la toalla y repita.
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